Voto Voluntario o barbarie

Razones de por qué la clase política acaba de destruirse a sí misma.

Resumen:

  1. El voto es por definición un derecho y una forma (dentro de varias) de manifestación política, tanto ejercerlo como no hacerlo.
  2. Hay un intento de eliminar el voto voluntario como manifestación de desacuerdo político, así como eliminarlo como indicador de desafección institucional.
  3. Existen sospechas más que fundamentadas que el voto obligatorio engordará aún más el causal de dinero a partidos políticos.
  4. La clase política no tiene idea que al volver obligatorio el voto, están formando un voto de rabia que se traducirá en una venganza contra los políticos. Se han dedicado sólo meter la “bomba” dentro de la institucionalidad y no desactivarla.

Mientras escribía esta columna de por qué el voto obligatorio es nefasto, termina de aprobarse con una amplia ventaja en la Camara de diputados la restauración del voto obligatorio, con amplia mayoría desde el PC hasta la UDI. Curioso es que una diputada Comunista como Mariseña Santibañez diga que la baja participación provocó desafección política, cuña que cualquier DC o incluso UDI podría haberse adjudicado.

Marisela

Pero bueno ¿Por qué es tan importante este tema? Dado el cambio mientras se escribía esta columna, la dividiremos en dos partes: Primero hablaremos de lo que debe significar el voto voluntario y por qué es importante mantenerlo de esta forma, y una segunda parte se tratará de lo que ocurrirá con este nuevo escenario para las próximas elecciones.

¿Por qué el voto debería mantenerse voluntario?

1. El voto es un derecho, no una obligación

Quizás la primera y principal razón es esta; no hay mayor punto.La lucha por el voto es una cuestión eminentemente originaria de las revoluciones liberales que buscaban un estado Moderno, secular, y con una base de legitimidad diferente a la Monarquía. Cuando los liberales proponen esta medida, están 1) buscando un mecanismo para que personas de distintos estamentos fuera de la Monarquía puedan tener injerencia en la elección de cargos públicos, y 2) Construir su forma de legitimidad social que en un comienzo es elitista y exclusiva, pero que luego de 100 años de luchas comienzan a convertirse en derecho universal.

Sin embargo, luego de que un mecanismo “marginal” como el sufragio se vuelve status quo, el sufragio se vuelve contra los plebeyos y se les obliga a realimentar el poder del Estado y del sistema político en particular, volviéndolo obligación.

En resumen: el voto es un derecho, una persona debe sentirse en plena de libertad de querer ir a votar o no, y la tradición y los orígenes de esta práctica en particular deberían mantenerse, sobre todo porque su opuesto es una arma contra la gente.

2. La abstención electoral es una forma legítima de mostrar descontento social contra el el sistema político

Luego de la aprobación del voto voluntario el año 2009, queda bastante claro y de manera sostenida cómo las personas se ven cada vez menos invitadas a participar de estas fiestas de la Democracia, cuestión que ya había sido visibilizada desde 19951 , porque el sistema de partidos, la promesa de crecimiento y en general la confianza en las instituciones se cae de manera sostenida. Además, comparativamente, es de los países que menos interés tiene en los partidos políticos 2, por lo tanto en estas condiciones, cuando se habla de voto obligatorio, es acallar una forma legítima de exposición del descontento social y la poca legitimidad que tiene este sistema político podrido.

En este sentido, lo que hace es deformar la medición del descontento social. a pesar de que habrán porcentajes considerables de personas que podrán excusarse de votar si no quieren, los porcentajes no darán un indicador preciso de cuánta aversión al sistema político hay, y conviertes al que voluntariamente manifiesta su desinterés en la política en un criminal, alguien que infringe la ley. Pareciera que desde el PC hasta Republicanos es algo que les interesa mantener.

El voto obligatorio engorda arcas partidistas de manera desmedida. El voto voluntario les da lo que pudieron recojer

En la actualidad, hay un 0.04UF Chilenas (alrededor de $1.100CLP) que se reembola por parte de el Estado hacia los candidatos, donde partidos que pudieron haber invertido poco, podrían llevarse grandes sumas de dinero como beneficios a los partidos, tal cual lo hizo beatriz sanchez en la elección presidencial del 2017.

¿El voto obligatorio implicará, entonces, darles más dinero a los partidos políticos? No, gracias.

La configuración del nuevo escenario

Con la aprobación de la ley de inscripción automática y voto obligatorio en la cámara de diputados, el proyecto de ley está cada vez más cerca de ser aprobado y con escasas opciones que se caiga, dada la transversalidad de quienes están a favor del proyecto, incluso con personales públicos de las encuestas-como hablamos en uno de los últimos capítulos de sus nuevos roles en el debate público- que llegan a cuasi “autoritarismos sufragistas”.

valdivieso tuit

Pero lejos de que el voto voluntario promueva más “legitimidad” al Estado y al sistema político actual, lo que sospechamos es que acaban de poner la primera piedra para el enterramiento de la clase política tal cual la conocemos. y tenemos al menos tres razones para pensar esto:

  1. En comparación a los datos de participación política del Plebiscito de Octubre del 2020 (50,9% del padrón) y de las Municipales 2016 (36% del Padrón), las votaciones de Mayo corresponden a una especie de “padrón municipal inflado por el auge del estallido social” (41% del Padrón). En otras palabras: los expertos creían que la votación de constituyentes iba a “contaminar” las municipales, aumentando participación y desplazando liderazgos tradicionales, sin embargo la cuestión fue una mezcla: fueron las municipales las que “contaminaron” en nivel de participación a la convención constituyente, pero las personas cambiaron su conducta y comenzaron a votar por lo que ellos consideran más extremos, vale decir: por independientes (constatado en las votaciones de la CC pero también en algunos Gobernadores regionales como Rodrigo Mundaca y otros alcaldes que tenían menos adjudicación partidista, aunque aún presente), y por personas percibidas como “fuera de los partidos tradicionales” (Concerta + Chile vamos), que redundó en un relativo aumento de alcaldías de poder como Santiago para el PC o RD para Viña del Mar.

Lo que se quiere decir con esto es que el resultado para la clase política es peor: No perdieron porque fue gente “nueva” a votar, perdieron porque las personas que habitualmente van a votar los abandonaron, les dieron la espalda, y no confían en ellos. y este es un comportamiento más permanente del que creen.

  1. No hay ninguna solución real a ningún conflicto social en Chile. Hasta el día de hoy nada ha mejorado desde la revuelta de Octubre del 2019 y, es más, las cosas han empeorado con la situación de la pandemia, la que sumado a los presos políticos existentes en Chile, aumenta la presión interna del país, redundando en una rabia interna poderosa. No es entonces descabellado pensar que las últimas elecciones fueron un plebiscito contra Piñera y un castigo para todos aquellos que, de una u otra forma, han colaborado a su genocida administración.

Como señalamos en una columna anterior, el 15 de Noviembre del 2019 lo que provoco fue “meter los problemas dentro de la casa”, lo que hará que la bomba detone dentro, en vez de desactivarla.

  1. Las distintas manifestaciones que han habido desde ese entonces, la articulación de la Lista del pueblo, la disidencia dentro de los propios diputados de derecha y las votaciones de este fin de semana son pequeñas bombas que están detonando dentro de la institucionalidad, y que bajo la apuesta de dejarlas en un lugar “más controlable” lo único que han hecho es provocar más daño.

En síntesis, con las próximas elecciones donde se renueva la otra mitad de los cargos electivos, sumado a la olla a presión de día a día crece más, y ahora con una posible obligación de que quienes están descontentos, harán que las personas vayan de manera obligada a ejercer un voto en venganza contra la clase política.

El voto de rabia, el voto emocional, el voto vengativo es algo que aún creen que puede ser controlado. No saben que acaban de poner la cuenta regresiva a su propia perdición


1Latinobarómetro. Informe 1995 - 2020. URL: https://www.latinobarometro.org/latdocs/INFORME_LATINOBAROMETRO_CHILE_1995_2020.pdf

2 Pew Research Center, Negative views of democracy more widespread in countries with low political affiliation. Retrieved from: http://www.pewresearch.org/fact-tank/2018/03/08/negative-views-of-democracy-more-widespread-in-countries-with-low-political-affiliation/#